La Guerra Social en tiempos de Independencia

Los esfuerzos hechos por Bolívar desde Nueva Granada (actual República de Colombia) con la finalidad de retomar el control del territorio venezolano tuvieron resultados positivos, ya que en poco tiempo logró llegar a Caracas con las tropas republicanas.

Sin embargo, a pesar de haber vencido en varios combates a los realistas, la presencia de estos últimos continuaba en el territorio, fortalecida no solo por los soldados preparados fieles a la Corona, sino también por gran cantidad de hombres y mujeres quienes, a pesar de haber nacido en estas tierras, se incorporaron a las filas realistas no precisamente a favor del rey, sino para defender sus ideales de libertad individual e igualdad social.

Después del éxito de la Campaña Admirable en 1813 vinieron tiempos difíciles para los patriotas y para la población venezolana como tal. Aún faltaba mucho para lograr la independencia del poder español.

Una Campaña Admirable para retomar el control del territorio.

Bolívar realizó ciertas acciones militares para vencer a los realistas en parte del actual territorio colombiano. El recorrido iniciado con sus tropas lo condujo hasta San José de Cúcuta, ciudad colombiana en frontera con Venezuela; allí Bolívar derrotó a las fuerzas españolas en febrero de 1813. Por tal acción, el congreso de aquel país le dio el título de “Brigadier de los Ejércitos de la Unión y Ciudadano de la Nueva Granada”.

Alentado por los triunfos obtenidos, Simón Bolívar envió a José Félix Ribas a solicitar el apoyo del gobierno colombiano para luchar con tropas neogranadinas en Venezuela y así poder retomar el control en el territorio.

Bolívar y su ejército salieron de Cúcuta el 14 de mayo de 1813 y entró a La Grita (actual estado Táchira) el 17 de mayo.

Acompañaron a Bolívar en estas acciones aproximadamente 500 hombres provenientes, en su mayoría, de Nueva Granada (actual República de Colombia), y algunos oficiales venezolanos que también contribuyeron con el logro de dicha campaña. Se destacan: Urdaneta, D’ Elhuyar, Ribas, Girardot, Ricaurte.

El 23 de mayo Bolívar y sus tropas entraron a Mérida, (actual edo. Mérida, ciudad en don- de le dieron por primera vez el título de Libertador) y a principios de junio llegaron a Trujillo (hoy edo. Trujillo), lugar en el cual proclamó el Decreto de Guerra a Muerte el día 15 del mismo mes. Este decreto fue un llamado a los americanos para que se incorporaran a la lucha por la causa patriota; pero aquellos españoles que se negaran a apoyarla serían condenados a muerte.

Era la respuesta de Bolívar ante las crueldades que Monteverde había cometido desde la Capitulación de San Mateo, cuando desconoció dicho tratado y se dedicó a perseguir y a encarcelar a todas aquellas personas que apoyaban a los patriotas.

Este decreto fue modificado por el Libertador con la proclama de San Carlos del 28 de julio de 1813 en el que hizo un llamado a los españoles y canarios a incorporarse a la lucha de los patriotas con la garantía de que serían tratados con igualdad. Probablemente, esta decisión se debió a que tanto en las filas realistas como patriotas luchaban venezolanos y españoles sin ninguna distinción. La guerra enseñaba a Bolívar que la independencia no se lograría sin el apoyo de un colectivo social.

Después de Trujillo (actual edo. Trujillo), los poblados de Guanare (hoy edo. Portuguesa), Barinas (actual edo. Barinas) y San Carlos (hoy edo. Cojedes) fueron liberados por Bolívar y sus soldados en pocos días; en esta última ciudad firmó una proclama en la que reiteró la invitación a los españoles y canarios a sumarse al ejército patriota, garantizándoles igualdad a aquellos que así lo hicieran.

La llegada a Barinas permitió al ejército contar con ganado suficiente para poder alimentarse. Además de ello, se comenzó la creación de caballerías, muy importantes para el desarrollo de las acciones posteriores. El avance de las tropas hizo que Monteverde huyera a Puerto Cabello (hoy edo. Carabobo); los patriotas continuaron hasta Valencia y de allí a Caracas, ciudad a donde llegaron Bolívar y sus soldados el 6 de agosto de 1813.

Durante la Campaña Admirable el número de combatientes en el ejército patriota aumentó considerablemente gracias a los soldados que desertaban de las tropas realistas y a aquellos que se presentaban de manera voluntaria. Estos últimos recibieron instrucciones sobre el manejo de las armas.

Bolívar por el occidente… ¡Y Mariño por el oriente!

Si bien Simón Bolívar combatió en occidente para retomar el control, Santiago Mariño también ejerció acciones desde el oriente del país con el mismo objetivo: liberar al territorio del poder español. Desde enero de 1813, Mariño, (junto con un grupo de personas que habían emigrado hacia Trinidad una vez que Monteverde retomó el control en 1812) se propuso realizar una expedición con el fin de luchar contra las tropas realistas. El 11 de enero se firmó, en un islote cercano al Golfo de Paria (hoy edo. Sucre), el Acta de Chacachacare, documento que marcó el inicio de la Campaña de Oriente. Güiria (en el actual estado Sucre) fue la primera ciudad tomada por los patriotas de oriente. Mientras los realistas decidieron bloquear el puerto, Mariño y su ejército avanzaron por el interior del territorio hasta llegar a Maturín (hoy edo. Monagas), sitio clave para la organización de la tropa y para el control de las exportaciones, pues desde allí se tenía el control de la zona oriental llanera, en donde se producía ganado. En agosto de 1813, para sorpresa de los realistas, los patriotas habían controlado el oriente del país, menos la provincia de Guayana (hoy edo. Bolívar), que se mantuvo fiel a España.

Bolívar reconoció los esfuerzos de Mariño y su ejército, que él denominó “Ejército Libertador de Oriente”. Para finales de 1813, esperaba la ayuda de las tropas orientales, que se dirigían hacia el centro por los llanos.

El Ejército de Oriente estaba integrado por un grupo de personas comprometidas con la causa patriota comenzando por la hermana de Mariño, Concepción Mariño, dueña de la hacienda en donde se firmó el Acta de Chacachacare, Juan Bautista Birdeu (empresario y navegante, un mulato francés) Manuel Piar, Juan Bautista Arismendi, José Francisco Bermúdez, Manuel Valdéz, entre otros. Las tropas de oriente estuvieron conformadas principalmente por mulatos y negros provenientes de las Antillas, así como algunos esclavizados de nuestro territorio.

A pesar de los esfuerzos hechos por Bolívar y Mariño, la presencia realista aún continuaba en el territorio. Los defensores del poder español habían perdido algunas batallas, pero no se daban por vencidos. Por ello el año siguiente, 1814 fue difícil para los patriotas.

1814: un año espantoso, reflejo de la lucha social

A pesar de que los patriotas habían obtenido importantes victorias, los realistas persistieron en sus ataques para retomar el poder ya que no existía un control absoluto.

Las batallas entre ambos bandos trajeron consigo una gran cantidad de muertes, las cuales aumentaron debido a los ataques y saqueos realizados por muchos esclavizados, zambos y mestizos que se incorporaron a los enfrentamientos bajo las órdenes de José Tomás Boves, nuevo líder del grupo realista.

En 1814 fue el despertar de los más oprimidos, de aquellos que durante años padecieron las grandes desigualdades existentes en la sociedad colonial y que luchaban por sus propios ideales más que por la independencia o permanencia del poder español.

Boves se encargó de incorporar, tanto a los hombres del llano como a los esclavizados de la zona central del país, a los bodegueros, como a reos y asesinos, gracias a una personalidad muy astuta, ofreciéndoles mejorar su situación (libertad en el caso de los esclavizados), inculcándoles el odio hacia los blancos y haciéndoles creer que la causa de las tropas republicanas era perjudicial para ellos.

Los realistas, en especial Boves, lograron reunir miles de hombres a las filas de su ejército, muchos de los cuales representaban la fuerza de trabajo en las haciendas y hatos ganaderos; esta situación perjudicó la economía de la Segunda República, iniciada en agosto de 1813. No se trató solo de restarle soldados a los patriotas, sino también la posibilidad de producir y comerciar, lo que también afectaba la compra de armas y alimentos.

Combates de 1814:

Cronología sobre algunos combates entre patriotas y realistas durante 1814

Febrero

3: Primera Batalla de La Puerta (actual estado Guárico). Las tropas de Boves que venían luchando desde septiembre de 1813, vencieron a las de Vicente Campo Elías. Los realistas fueron rumbo a La Victoria (actual estado Aragua).

12: Batalla de La Victoria. Los patriotas, al mando de José Félix Ribas, lograron derrotar a los realistas. Participaron estudiantes de la Universidad de Caracas y otros combatientes que Ribas había reclutado desde el mes de enero. Los refuerzos de Vicente Campo Elías y Antonio Ricaurte contribuyeron al triunfo de la batalla.

Marzo

25: Batalla de San Mateo (estado Aragua): Antonio Ricaurte voló el parque de armas de la Casa Alta de San Mateo con el fin de evitar que Boves y sus tropas se apoderaran de estas.

31: Batalla de Bocachica (estado Aragua): Las tropas de Boves se enfrentaron al Ejército Libertador de Oriente. Ganan los patriotas ya que los soldados de Mariño, que en su mayoría habían sido esclavizados, incendiaron parte del lugar donde se dio la batalla y avanzaron entre el humo para atacar a los realistas.

Junio

15: Segunda Batalla de La Puerta. Las tropas de Boves vencieron a las de Mariño y Bolívar. Hubo bajas significativas en el bando patriota. Ricaurte en San Mateo, Antonio Herrera Toro.

Con la derrota de los patriotas en la Segunda Batalla de La Puerta el temor comenzó a apoderarse de las personas que habitaban en Caracas y Valencia (actual edo. Carabobo), pues era cuestión de tiempo para que Boves tomara el control de ambas ciudades. En efecto lo hizo, llegó a Valencia y permaneció allí 20 días, en los que su ejército, conocido como la “legión infernal” se encargó de asesinar a hombres y mujeres, quemar viviendas, saquear y robar.

En los primeros días de julio se dispuso a ir hacia Caracas, por lo que para el día siete se produjo la emigración de gran parte de la población hacia Barcelona. Unas 20 mil personas, entre las que había hombres, mujeres y niños tuvieron que realizar un recorrido de aproximadamente 20 días a pie en los cuales pasaron hambre, sed y cansancio, acompañados del terror que significó tener que abandonar la ciudad ante la llegada de Boves y su tropa.

En Caracas, los realistas tomaron la ciudad. Boves llegó el 16 de julio. No hizo grandes matanzas y saqueos probablemente porque la Junta de Gobierno y la Iglesia le habían dado la bienvenida sin ninguna oposición. Además de ello, los productos de las bodegas (pulperías) así como los objetos de plata presentes en las iglesias habían sido tomados por los patriotas, quienes partieron días antes a Barcelona, (hoy edo. Anzoátegui).

Los caraqueños no llegaron a Barcelona. Aproximadamente nueve mil personas lograron sobrevivir. El grupo que había partido de Caracas se dividió en dos partes después de pasar por Cúpira, (edo. Miranda). Quienes tomaron el camino de la costa fueron atacados por los barcos españoles.

La llegada a Barcelona (actual edo. Anzoátegui) tampoco significó un gran alivio, ya que allí los esperaba una tropa realista comandada por Francisco Tomás Morales, la cual venció el 17 de agosto al ejército patriota. Esto hizo que Bolívar se fuera a Cumaná a reorganizar las operaciones, pero durante un Consejo de Oficiales fue desconocida su autoridad por parte de José Félix Ribas. Ante esta situación, tanto Mariño como Bolívar fueron expulsados a Nueva Granada (hoy República de Colombia).

Ribas asumió el control, reunió a unos cuatro mil hombres y salió a enfrentar a Boves el 5 de diciembre en Urica (actual estado Anzoátegui). Los patriotas fueron nuevamente derrotados. Boves murió en el combate.

El 31 de enero de 1815 José Félix Ribas fue capturado y decapitado. Su cabeza fue frita en aceite y colocada en la plaza mayor de Caracas. Una vez derrotados los patriotas en Valencia (hoy edo. Carabobo) y Caracas, Rafael Urdaneta se fue a los Andes, logró juntar una tropa de 1.700 soldados aproximadamente pero fue vencido por los realistas en Mucuchíes (estado Mérida). Partió hacia Cúcuta (Nueva Granada).

Una lección por aprender

Con los sucesos del año 1814, Bolívar aprendió algo muy importante: la independencia del poder español no se lograría sin el apoyo de las mayorías. Se hacía necesario incorporar a la lucha por la causa patriota a aquellos hombres y mujeres de los llanos orientales y centrales que hasta ese momento no se sentían plenamente identificados con el establecimiento de una nueva república.

El ejército republicano del Libertador no era suficiente para enfrentar al enemigo, pues la Guerra por la Independencia tenía un carácter étnico y social, casi civil. Fue una lucha entre venezolanos como se te comentó en el capítulo anterior.

A través del Manifiesto de Carúpano del año 1814, Bolívar dejó por escrito una verdad muy importante, eran nuestros hermanos y no los españoles los que habían desangrado a la patria, a la Segunda República.

El chileno Pablo Neruda, quien recibió el Premio Novel de Literatura en el año 1971 escribió en su poema llamado “Canto a Bolívar” una estrofa que nos ilustra las derrotas sufridas por el Libertador en una guerra entre venezolanos.

Fuente: Cátedra Bolivariana

Conociendo la Historia de La Primera República de Venezuela (1810 – 1812)

Con el nombre de Primera República se conoce en la historiografía venezolana el período transcurrido entre el 19 de abril de 1810 y el 30 de julio de 1812. Este lapso como tal, se inicia en Caracas con el movimiento del 19 de abril de 1810, cuando el gobernador y capitán general Vicente Emparan y Orbe y otras autoridades españolas son derrocadas pacíficamente y sustituidas por una Junta Suprema de Gobierno que al comienzo se declaró «protectora de los derechos de Fernando VII» pero cuyos actos se orientaban al logro de la independencia absoluta de Venezuela.

La Primera República de Venezuela es el período de la historia de Venezuela que abarca el fin de la Junta Conservadora de los Derechos de Fernando VII y el inicio de las guerras de independencia de Venezuela que abarca el período comprendido desde el 2 de marzo de 1811 con la instalación del Primer Congreso Constituyente de Venezuela y la primera unificación de las Siete Provincias del Territorio venezolano en el cual el territorio de la Capitanía General de Venezuela comienza un nuevo ciclo para ser un Estado libre, autónomo e independiente, frente a España, Francia o cualquier potencia extranjera que intente dominar o colonizar el territorio. En este período histórico inician los Estados Unidos de Venezuela, con el ejército patriota que hizo frente a las guerras de independencia. En este escenario se abarcan acontecimientos importantes como el inicio de la guerra de independencia, el fin de la Junta de Caracas, el Primer Congreso Constituyente, la Declaración de Independencia de Venezuela, la Primera Constitución de Venezuela, la capitulación de San Mateo y otros hechos que comienzan a construir Venezuela como un nuevo Estado.

La Primera Republica fue, como experiencia política, matriz y prototipo de estado disociado y minúsculo surgido de la lucha anticolonial, que se apoyaba en las coordinadas de un modo de producción ilusoriamente percibido como progresivo, en un territorio puntual del virreinato de la Nueva Granada, apoyado en la Hegemonía británica”.

Era un Nuevo Estado con la característica esencial de Estado independiente que se conformaría a posterior con la declaración del 5 de julio de 1811 que sería la firma del acta de independencia donde se brindaría a la primera republica una autodeterminación muy relevante para todas las masas que apoyarían este proyecto de Primera Republica; con la formación de la misma se da la idea de nuevas alianzas entre los distintos estratos sociales para la conservación de un Estado Nuevo y de esta manera poder mejorar la situación económica, social y política que hasta el momento con lo que era la Junta Suprema de Caracas se veía fracturada por la incapacidad de tomas de decisiones oportunas a causa de la dependencia de una serie de dominaciones extranjeras, en el cual ese panorama para la primera Republica resulta ser más favorable; el interés de la consolidación de la primera republica era búsqueda de una organización constitucional y administrativa adecuándola a las necesidades de una nueva nación pero el segundo aspecto que sería la parte administrativa de la primera republica no fue constituida bien del todo porque no había control en todo el país para ese momento lo que permitió que los realistas entraran fácilmente al territorio y cuando paso el terremoto de 1812 fue muy fácil de invadir el poder y tomarlo, ya que tuvo organización como estado pero administrativamente estaba falta de recursos lo que conlleva a que como estado era República pero no tenia reconocimiento. Los factores más relevantes es la idea de conservar un poder de la manera más organizada y estable posible con los principios que posteriormente se estipularían en la constitución basándose en los derechos del pueblo. Liberación del yugo español con la búsqueda de apoyo político y diplomático a los principales aliados y potencias extranjeras como: las Antillas, Estados Unidos, México, Nueva Granada, Inglaterra); donde era necesario para la búsqueda de reconocimiento, la ayuda económica, el suministro de armamentos, la protección contra la ofensiva española y liberar el comercio para el establecimiento de nuevos mercados y ampliación de rutas comerciales.

Los objetivos de la Primera República eran consolidar unas bases federativas con un cuerpo autónomo, dedicado a los intereses de la nación de evitar futuros peligros de invasión por sectores revolucionarios en contra de las ideas del ejecutivo nacional con unas líneas sólidas, participativas y protagónicas que se observaría a posterior con la creación del Primer Congreso Constituyente. La Primera República propone reformar los vacíos administrativos anteriores que tenían que ver con la conformación de la Junta de Caracas, protección del culto y protección de la industria, extender relaciones mercantiles en cuanto lo permita la situación política, mantener la reciprocidad de auxilios y socorros con los gobiernos de los países aliados, y establecer un poder ejecutivo adecuado a los capacidades del País.